La
vida no deja de darnos sorpresas y parece que estas se relacionan entre sí. Hace
unos días un alumno me contaba conmovido su viaje a Madrid y su visita a la exposición
”El legado de la Casa
de Alba”, donde pudo observar, para su asombro de niño, cuadros de Murillo,
Zurbarán, Zuloaga, Goya o la primera
edición de “El Quijote” o “Las Cartas de Cristóbal Colón”, entre una multitud
de 150 piezas pertenecientes al rico patrimonio de los Alba. Mientras escribo
estas letras aún perdura en mi retina la mirada fascinada de José al hablarme
de Colón, de Cervantes…Le recordaba yo al respecto que no hacía mucho, poco más de un año, la titular de la Casa de Alba, doña Cayetana, concretamente
el 11 de octubre de 2.011, había sido noticia y era por la publicación de sus Memorias que llevaban
el sencillo y natural título de “Yo,
Cayetana”, y que tuvo la suerte de ser uno
de los libros más vendidos en las Navidades del 2.011¿Méritos? ¿Calidad
literaria? Quizás el mero oportunismo de ser quien es y sus diferentes avatares
personales ha contribuido al éxito. Pero recientemente Tanuca, nombre de niña
de Cayetana, ha vuelto a sorprendernos y decirnos con esa sinceridad que le
caracteriza que gracias a su esposo ,don Alfonso Diez Carabante, funcionario en
excedencia, había hecho realidad uno de sus sueños más deseados, que no era
otro que tener un bello gallinero en el Palacio de Dueñas, donde pueda agrupar
gallinas de todas las clases.
Ante
afirmaciones de este tipo y proviniendo de quien aparentemente tiene todo, uno
saca la sencilla conclusión de que para ser feliz, con poco basta, de ahí
aquella frase tan repetida en la postguerra
que decía la novia a su novio, “contigo pan y cebolla”. Ahora que
hablamos de la “ciberguerra de China contra América”, de la lucha a muerte
entre “teléfonos móviles y “smartphone”, no viene mal recordar que muchas de
los cultivos tradicionales del suelo hispano, olivo, trigo y vid, eran una de
las fuentes principales de ingresos en la España romana y lo siguen siendo en la
actualidad. ¿¨Qué sería de España si no tuviéramos vinos o aceites de la
calidad que tenemos?. Ya dice la Sagrada Biblia que la primera
planta que sembró Noé después del Diluvio fue una vid.
El
sueño de Cayetana tiene más importancia
que la simple anécdota, el dato simpático, nos recuerda que tenemos la riqueza
al alcance de la mano y no siempre la sabemos aprovechar, y que en todo tiempo
o ciclo económico debemos utilizar bien todos nuestros recursos, independiente
de factor crisis o no, pues que se sepa sin comer no se vive y , en nuestra
dieta, la carne de pollo, el caldo de gallina y los huevos con o sin puntilla
son elementos apreciados.