viernes, 27 de abril de 2018

“ Hombres y mujeres que tengan conciencia…”


Desconozco los motivos o causas por las que vienen a  mi cabeza unas palabras pronunciadas  en la Pola republicana de los años 30 por don Álvaro de Albornoz cuando decía aquello de “No hace falta subir al poder hombres de mayor  inteligencia, sino hombres que tengan conciencia …” ( en aquel entonces las mujeres aún estaban silenciadas), y es que viendo lo que vemos, o mejor dicho lo que se airea y se publica – debe haber aún hechos de mayor gravedad- , uno tiene que buscar refugio, protección, defensa,  ante tanta omisión , robo, abuso, violación, mentira, falsas verdades, y es que a mi edad, aún mantengo y defiendo  el criterio de que no todo vale, y que si  algo debe preocuparnos es la defensa y protección de la dignidad de las personas, sea cual sea su procedencia, clase social y manera de pensar.

  Hoy nos hemos despertado con la buena  noticia de  que nuestra economía ha subido en el primer trimestre el 0’7% , que la paga de pensionistas y viudas se incrementará respectivamente  en casi 15  y 25 euros , pero ni aun así  brilla el sol ni brota la alegría. Faltan otros ingredientes como sentirse querido, respetado, protegido, en resumen, digno, y es que uno  observa  con pesar que los abusos van a más , que  crecen los silencios, que no se publica todo  y que las ruedas de prensa sin preguntas  proliferan  y si esto no fuera bastante, ni siquiera se respeta el voto que se deposita en las urnas – la reforma de la ley electoral : listas abiertas, segunda vuelta… para otro momento-.

La comida está sosa, necesita sal, picante, verdad, dignidad, conciencia, y es aquí donde uno tiene que pararse, pues sin conciencia personal y colectiva no hay nación , región , concejo que resista, y a esta tarea se nos llama. Es urgente. No es la primera vez que he denunciado que durante algunas décadas hemos confundido el bienestar y el progreso económico con el progreso real, verdadero, que no es otro que el moral,  y hechos recientes dan prueba de nuestro error. Hoy , por desgracia, las portadas de prensa hablan de “camadas, manadas, piaras, jaurías, de sementales…”, pero afortunadamente el hombre y la mujer es algo más que eso.

Y ante esto que pasa es lógico que uno se pregunte ¿qué tipo de ciudadano queremos? ¿qué tipo de persona formamos? ¿Sólo con Tecnología e Informática? ¿Sólo con Humanidades, Moral y Ética? ¿Máquina o Hombre?  … Creo que la respuesta la sabemos todos, nos obliga, pide  sentido común y hacer valer con hechos que el ser más importante sobre la Tierra es el ser humano y que todo debe girar en torno a él .   A lo largo del año  se organizan campañas de sensibilización para combatir la obesidad de nuestros jóvenes, su nivel de colesterol, diabetes…pero pocas he visto donde se preocupen de su salud mental, de su nivel moral y de los mensajes que reciben y consecuencias de los mismos, pues todos dejan huella, como el viejo Eloy , uno de los protagonistas de Miguel Delibés, que me llevó a tomar agua nada más levantarme por la mañana como él hacía . ¡Cuántas novelas incorporan páginas y capítulos innecesarios para facilitar su compra!¡Cuántas películas incorporan dosis innecesarias de violencia,  sexo para incrementar la taquilla!...¿Alguien se preocupa de los efectos y daños colaterales? Últimamente el Servicio de Salud del Principado ha dado el toque de alarma ante el incremento de suicidios.

Ha llegado el momento de implantar, de reivindicar una asignatura fundamental para la persistencia de la especie, del ser humano, y esta  lleva el nombre de DIGNIDAD y sin ella ni yo hubiera escrito estas letras y ni siquiera hubiera nacido. Esta DIGNIDAD pide , demanda,  una esmerada educación de la conciencia, que diferencia el BIEN del MAL, la VIDA de la MUERTE.



                             José Antonio Noval Cueto.



viernes, 20 de abril de 2018

“Si no hubiera chigres…"



En plena ciclogénesis explosiva de “Hugo” que se saldó con
muchos daños en el litorial asturiano y en la clase política me sorprendió un titular de prensa que decía:  “El reto de Asturias: Cambiar chigres por gimnasios”, que condensaba las declaraciones efectuadas por el nuevo decano del Colegio de Licenciados de Educación Física. Es muy de la clase periodística magnificar, enfatizar lo que se dice y más en este caso, cuando quien hace esas declaraciones es un profesional del deporte y como es lógico habla de las excelencias del ejercicio físico a todas las edades, ya de niño, de adulto o de mayor, y esto no es nada nuevo, pues ya los clásicos decían aquello de “mens sana in corpore sano”, y más ahora que el culto al músculo y la guerra contra el michelín y el abdomen tiene muchos sufridos seguidores.


Todos sabemos que hay mucha exageración en el título, que el problema o los problemas de Asturias son de más calado, más hondos  , que  requieren un análisis más profundo, y que los “chigres”, taberna o bar típico de Asturias, han tenido y tienen una función  importante en nuestra vida, y eso lo digo yo, que soy hijo de unos “chigreros” de Lugones, y que a mi edad es el título más honroso que poseo.

 El chigre es el lugar donde con el pretexto de un vino , un “culete” o una cerveza…,se reúnen  amigos , vecinos,  descansan y se relajan de los sinsabores del día y  hablan de todo: del trabajo, de la familia, del pueblo, de lo que está bien o de lo que habría que cambiar…Noticias  de si se vende tal finca, piso o casa…que si Santiago está ingresado o si se necesita mano de obra para tal fábrica o si el hijo de Alfonso se casa,  si suben el Sporting y el Oviedo o si de una vez veremos a Puigdemont en chirola y otras muchas...Ahora que los vendedores de prensa ya no vocean las noticias por las calles, aquí, en el chigre, se leen , se comentan y engordan con las sugerencias y aportaciones de los reunidos, que incluso divulgan noticias que no se publican, y con la peculiaridad que cada “chigre”  tiene sus noticias, aquellas que considera más relevantes, más importantes. Lo único de lamentar es que algunas personas ya no puedan tomar su café diario, pues obligaciones familiares se lo impiden...

Si el chigre es  importante en toda Asturias,  con más razón en los pequeños pueblos, donde hace la función de centro social, tienda y más ahora que tantas personas viven solas. Por no haber chigres, los pueblos se quedan sin vecinos, se aíslan, se cierran. Por no haber chigres uno es desconocido en su aldea, su villa o ciudad y más en naciones con tantas horas de sol, de luz, como la nuestra, y con un clima que la convierten en gimnasio  casi todo el año.

Expuestas esta razones viene bien reconocer que debemos combatir la vida sedentario, dar un paseo, pegarnos un baño, andar en bici…pero también tomarnos algo con los amigos y enriquecernos  con su conversación, que el que escucha, aprende y para ello tenemos dos orejas... 

Para concluir estas letras voy a poner dos ejemplos que justifican lo dicho. El pasado martes, en Pola, en plena epidemia de licenciados sin título y sin másters, Tomás, con la agudeza que le caracteriza, nos suelta:

-     -     Oye, como sigan apareciendo tantos licenciados sin título o sin másters, voy a pedir que al perro en vez de implantarle un “chip”, le implanten un “master”.

Días  después, en Lugones, en un bar que frecuento,  Juan  me pregunta:

-        - ¿José dónde está el segundo hotel mejor de España?

Yo sin titubear le contesto:

-      -    En Cofiño (Parres) y se llama PuebloAstur

Supe la respuesta por casualidad, pues lo había leído media hora antes en un periódico.

Ante la sorpresa que causó mi contestación, Pascual, otro de los presentes, para complacer a Juan me dice:

-       -   ¿Cuántos hijos tuvo Jacob?

-         Creo que eran doce – repuse- , pero todos sus nombres no los sé.
Entonces Pascual se dirige a Juan y le dice:

-      -    Juan , díselos:

Y éste empezó a soltarlos de su boca:

-        - Rubén, Simón, Leví, Judá, Zabulón, Isacar, Dan, Gad, Aser, Neftalí, José, Benjamín.

De todo esto y de más cosas se hablan en el chigre, pero si quedase alguna duda  os aconsejo que leáis “Historia de una taberna”, de Antonio Díaz Cañabate, una de las mejores prosas que he leído.

                   José Antonio Noval Cueto.






sábado, 14 de abril de 2018

“Cuenta con nosotros, Madre…




A cierta edad  cuando  la vanidad y   los prejuicios ya deben haber desaparecido, cuando uno ya tiene la libertad que dan los años  y no busca el aplauso fácil ni la  complacencia, sino ser fiel a sí mismo y a su manera de entender la vida, me tomo el atrevimiento de escribir estas letras con la única pretensión de trasladaros unas reflexiones que espero que os sean útiles como lo han sido y son para mí. Y todo ello a raíz de un reciente viaje al santuario de Fátima, o para ser más correctos y precisos al Santuario de Nuestra Señora del Rosario de Fátima. Antes de continuar con el relato y por si alguno pudiera molestarle, le confieso que soy católico, apostólico y romano, y que todos estos adjetivos no bastan para hacerme mejor persona – si Dios no me ayuda-  , libre de errores, egoísmos, negligencias y  silencios… aunque lo intento. Mi afición preferida es la lectura tanto de periódicos como de libros, y uno de los  artículos que últimamente he recortado y guardado en mi cuaderno se titula “Reza por mí” .Se publicó el  11 de marzo en el ABC de Sevilla y se autor es el periodista Miguel Ángel Robles. Fue viral en la red. Nacer un 13 de mayo y año mariano obliga y más aún si tu madre te lo recuerda siempre que puede, lo mismo que las campanas del santuario de Fátima lo evocan con su tañido al  dar las horas. Era la época en que las madres rezaban con sus hijos, como lo recuerda tiernamente Pablo Neruda en uno de sus artículos…

De ahí mi promesa de visitar Fátima antes que concluya su centenario y después de muchas tentativas, en  plena Pascua  o Resurrección de la Vida,  cuando se cumplen noventa y nueve años de la muerte de Francisco Martos, uno de los tres pastorcitos, canonizado el año pasado y fallecido un 4 de abril de 1919. El viaje a pesar de ser apresurado, corto y casi diría improvisado cumplió su misión. Su objetivo que no era otro que evidenciar la importancia de la fe en nuestra vida, en nuestra sociedad. Algo que deberíamos ya tener asumido, pero que por motivos dispares ( manipulación, silencios interesados, estrategias, inercias, prejuicios…) y otros que se me escapan, no se tiene  y más cuando el cristianismo es uno de los pilares básicos  de la cultura occidental, con evidencias  clamorosas en la misma Pola de Siero y su hito fundacional en el año 1.141 cuando doña María Ordóñez creó un “hospital de peregrinos”.

No voy a hablaros de la tranquilidad, devoción, conversiones, encuentros  y silencio que se aspiran en el Santuario, ni de las multitudes de personas , de toda raza, condición y continente, que asisten y participan activamente en   las ceremonias religiosas litúrgicamente muy cuidadas o que se confiesan en la capilla de la reconciliación, con sacerdotes que conocen sus idiomas. Eso atañe a cada uno. Son testimonios personales.  Hoy, en estos momentos en que escribo, también 13, pero de abril, me traslado a Cova de Iría,  donde Virgen del Rosario de Fátima hace ya casi 101 años se apareció  a tres pastorcitos (Jacinta, Francisco y Lucia) para  que  : Rezáramos diariamente el Rosario, amáramos el Corazón Inmaculado de María y tuviéramos el coraje de pedir perdón por nuestros fallos, errores, que no perseveráramos en ellos.

La pregunta que yo me hago es: “¿Cumplimos el encargo?”  La respuesta no es fácil. El cielo se llena de nubes y dudas y es que en todo este tiempo han pasado cosas de mucha importancia, algunas terribles así: Revolución en Rusia, Guerra Civil en España, 2º Guerra Mundial, Caída del Muro de Berlín, Terrorismo islámico  y nuevas tensiones nacionalistas en Europa, junto con la llegada de miles de refugios que huyen de sus países de origen, principalmente de Siria …

La vida es más sencilla de lo que uno piensa, siempre que se tenga sentido común  . Aún estamos a tiempo de mejorar, de cambiar la sociedad. La receta la tenemos al alcance de la mano, sólo se necesita un Rosario, y es que como nos decía el Padre Héctor en la misa en español celebrada en la Capilla de las Apariciones: “La Madre, cuenta con nosotros”. ¡Mucho ánimo!

En este viaje meteórico no faltó ni el chuletón de morucha en Salamanca ni la visita de la librería Lello, en Oporto o Porto como dicen los portugueses,  una de las más antiguas de Europa, fundada en 1906, y donde en su expositor de libros en castellano sobresalía “El Quijote” de la Real Academia Española, en la edición supervisada por don Francisco Rico, y es que quizás a don Quijote le hubiera ido mejor por tierras del Duero que por Barcelona. De las novedades ”El monarca de las sombras” de Javier Cercas.

 Este escrito llega a su fin y recuerda que ya en 2004, la periodista Oriana Falachi, atea cristiana como se definía, ya avisaba y alertaba a Europa de que Eurabia llegaba. ¿Hemos hecho o hacemos algo por evitarlo? Velas y rosas en alguna calle y poco más. Últimamente se incrementa la venta de rosarios, pero no la demografía. Tenemos miedo a la vida, la cosificamos en exceso. Recemos unos por otros.

                                   José Antonio Noval Cueto.



sábado, 7 de abril de 2018

“Combatiendo la nada…”




Hace unos días , previos a la Semana Santa o Semana de Pasión, alertaba desde esta columna de la peligrosa y destructiva socialización de la nada, que lleva aparejada la ausencia de obligaciones y compromisos, la entronización del “yo”, del hedonismo y del mundo a mi  medida , con desprecio del pasado , sin horizontes del futuro, sin compromisos con nada ni con nadie, como si sólo existiera el presente, mi presente, como si lo quisiéramos absolutizar, aunque reconociendo que no tenemos mimbres, cuerdas, para detenerlo, y que ese axioma de la eterna, musculosa y perenne juventud, por muchos masajes, terapias  y cremas que nos demos, tiene fecha de caducidad, es un imposible,  y cuanto más tardemos en asimilarlo, mayor será nuestra frustración o desesperación.  Es bueno saberse finitos y limitados, y a partir de ahí pedir clemencia, ayuda… en mi caso al Amo de la Vida. Y a esto se nos invita en esta Semana de Pasión, donde todo un Dios se hace hombre para salvarnos,  cargar con nuestros pecados y mostrarnos un rayo de esperanza, y sólo nos pide, dentro de la máxima libertad, que tengamos los oídos y ojos abiertos, ya que sólo Él tiene palabras de vida eterna.

De las rigurosas semanas santa de los años 60 a las actuales hay muchas diferencias, si antes dominaba la excesiva austeridad, ahora el relajo más absoluto, con coche, playa, sol y churrasco, pero  , afortunadamente,  entre ambos extremos empieza a moverse algo y así, sorprendentemente, cada año tenemos más pasos y procesiones en nuestras calles y más fieles en pos de ellas, y ello en toda España, incluso en Asturias, donde el amplio abanico de procesiones alcanza a todos los concejos.

Mi semana santa tuvo como preludio la lectura del libro “Quo Vadis?” del polaco  Henryk Sienkiewicz, donde aparecen personajes como Nerón, entonces dueño del mundo, y los protagonistas del relato : el joven ambicioso y apuesto Marco Vinicio, que regresa a Roma después lograr grandes éxitos con la Vigésimo Cuarta Legión Romana, y la bella y honesta Ligia, y a  Petronio, inteligente y hábil cortesano, o el mismo Quilón Quilonides (en algunos libros aparece Chilón, Chilonides) mal utilizado en esta película que está  ambientada en los primeros años del cristianismo en Roma, con la presencia de los apóstoles Pedro Y Pablo…Mi propósito era cotejar las relaciones entre la literatura y el cine – de ahí que mis alumnos tenían también  la obligación de ver la película- así como la evolución de la conducta de un Marco pagano a un Marco cristiano. Afortunadamente la noche del miércoles santo se televisó  “Quo Vadis” en Tele 13. De todo este trabajo me quedó con unas frases que sirven bien para introducirnos en la Pasión  cuando se nos dice: “Mírate en tu corazón y reconócete como realmente eres”, y cuando la misma Ligia, heroína cristiana, le dice a Marco: “A Cristo ya lo llevas dentro, lo sientes más fuertemente de lo que tú crees…”.

 Con esta sensibilización uno se mete en los sufrimientos del Señor, de Jueves  y Viernes Santo con  el cuidado exquisito de la Palabra, y es que como bien dicen los Evangelios el principal mandamiento de la Ley de Dios es:” ¡Escucha Israel!, amarás a Dios sobre todas las cosas”, y esto de “escuchar”  en una época de ruido y prisa es necesario recordarlo. Todo esto lo ha cuidado y mimado la comunidad parroquial de San Pedro de Pola de Siero y su máximo responsable don Juan Manuel Hevia Fisas, y de todo nos hemos beneficiado sus feligreses, y estas letras quieren ser testimonio de ello.

Decía uno de los personajes de “Quo Vadis?”  que “las lágrimas siempre se vierten como preludio de alegrías”, y la Vigilia Pascual del Sábado Santo en San Pedro de Pola de Siero, con muchos fieles, con oscuridad, silencio y velas, ha sido de las que marca época, de las difunde sentimientos, de la que expande la alegría de los que vivimos una misma fe, y es que mientras los versos de Lorca hablan de que “viejos cuchillos están tiritando bajo el polvo”, suenan en mi cabeza palabras que dicen : “Si supieras lo que te amo, si supieras lo que te amo, no te atreverías a vivir sin amor…”  o el bello fragmento del Pregón Pascual que nos dice : “¡Que noche tan dichosa en que se une el cielo con la tierra, lo humano con lo divino!...¡Resucitó! ¡Aleluya!…”  Alegría que el propio sacerdote, don Juan Manuel, testimonió desde el altar y que efusivamente traslado a sus fieles.

Nuevamente cabe plantearse la pregunta que hacía Marco Vinicio en carta a Ligia de :”¿cómo pueden caber juntos en la tierra hombres como Pedro, Pablo y Nerón?... y la respuesta la aventuro en palabras de San Pablo cuando dice: “El amor sujeta más sólidamente que el miedo”. Reitero mi agradecimiento.

                                           ¡Felices Pascuas!

                                       José Antonio Noval Cueto.