sábado, 25 de febrero de 2023

“En la tierra de las gentes de bien” ("La Nueva España Digital de Siero,26-II-2023")



Desde el pasado martes, 21 de febrero, festividad de San Secundino y San Serapio, con motivo de la sesión de Control al Gobierno en el Senado, se ha puesto de moda una expresión muy nuestra, muy de siempre, muy de tierras cristianas y de Don Quijote y Sancho, a raíz de la reconvención que hizo el Sr. Feijóo al presidente del Gobierno , Sr. Sánchez , al pedirle que  “Deje de molestar a la gente de bien y de meterse en la vida de los españoles”. Fue pronunciar esta expresión “gentes de bien” y los batallones mediáticos y pesebristas se lanzaron a la yugular del  líder popular, con la villana intención de torcer y forzar la expresión , y silencian las preguntas o quejas que el Presidente no responde ni resuelve. Un episodio más de la España virtual, de las ruedas de prensa teledirigidas y seleccionadas de plena pandemia.

El pueblo llano conoce bien la expresión y el sentido y contexto de la misma, y le produce estupor, asombro, vergüenza, la injustificada reacción que han producido las mismas, pues es de todos sabido que el mal y el bien existen, y así nos lo recuerdan textos tan nuestros como “El Quijote”, cuando Alonso Quijano nos dice: “Don Quijote soy y mi profesión la andante caballería. Son mis leyes el deshacer entuertos, prodigar el bien y evitar el mal. Huyo de la vida regalada, de la ambición y la hipocresía, y busco para mi propia gloria la senda angosta y difícil. ¿Es eso, de tonto y mentecato? “  El Nuevo Testamento cuenta que Jesús  pasó por la vida haciendo el bien y el Salmo 1 dice:” Dichoso aquel varón que no se deja llevar de los consejos de los malos, ni se detiene en el camino de los pecadores, ni se asienta en la cátedra pestilencial de los libertinos”…Y en las prédicas improvisadas y diarias de nuestros padres estaba su deseo de que fuéramos gente de bien, que moderáramos nuestras ambiciones, que no todo vale, que al día solo se comía tres veces , que uno tenga siempre la libertad de escoger, de decir “sí” o “no”; en resumen, que no se venda por un plato de lentejas, que la dignidad de una persona es lo más importante que uno tiene y debe cuidar, proteger.

Yo no sé si pertenezco al exclusivo y digno grupo de las “gentes de bien”, pero lo intento .Siempre procure que mi  trabajo y conducta contribuyera al bien de la sociedad. Son muchas las personas que he conocido y conozco que pertenecen al honroso grupo de las “gentes de bien”, que madrugan , trabajan, pasan penurias, renuncias , a fin de que en sus casas no falte lo más imprescindible para vivir con dignidad y afrontar el futuro con seguridad, con fuerza, y es esto lo que echan de menos en los tiempos que vivimos , y si  no que se lo pregunten a las 30.000 familias asturianas con todos sus miembros sin trabajo.

Son y somos las mismas personas que creemos que los poderes públicos deben trasladarnos algo de apoyo, de estímulo, de seguridad, y no engañarnos con falsas promesas y mentiras constantes, con leyes de quita y pon, con leyes que tensionan, confunden y dividen a los españoles - basta escuchar a los siquiatras , y ver como se agudizan los problemas - . Son y somos muchos los que estamos preocupados con el tipo de sociedad que estamos creando, en el que las desigualdades van a más y la ley no es igual para todos (indultos a los sediciosos) ,  basada en el mero consumo y vacío existencial  que conduce a callejones sin salida y cada vez menos duraderos(suicidios) en esta cultura de la muerte que se ha entronizado y que avala la baja demografía que tenemos.

Son y somos muchos los que no creemos que sea un progreso abortar, más siendo menor de edad y sin permiso de los padres…Son y somos muchos los que no queremos renunciar a nuestras responsabilidades y obligaciones de padres, ya que los hijos son nuestros, y al Estado le pedimos que cree las condiciones necesarias para que uno pueda ejercerlas y   vivir con dignidad y en paz, y para ello un factor esencial, no el único,  es el trabajo, del que tanto escaseamos y más los jóvenes. Podría decir más cosas, pero creo que lo dicho avala la queja y preocupación que invade a muchas personas de bien: Menos mentiras, menos tensiones y respeten la idiosincrasia del país donde viven.

 Hace ya muchos años, en mis tiempos de facultad alguna demagoga de la revolución social decía que para que ésta triunfara las madres no debían amar a sus hijos. Aberraciones como éstas aún pululan, a día de hoy, en el ambiente.

 

                              José Antonio Noval Cueto.





sábado, 18 de febrero de 2023

“En busca de una noticia…” ("La Nueva España Digital de Siero", 19-II-2023)


Después de más de tres meses  y casi una legislatura con el “sí es sí”, busco una noticia que pueda justificar unas letras, que motive, que alegre los corazones, y con esa mentalidad he ido rastreando periódicos, pues ya está bien de taladrar las conciencias de las personas con mensajes que no se ajustan a nuestras necesidades, que como ya he dicho en esta columna, empiezan por las cosas del comer y más ahora que los alimentos suben más de un 15%, y cuando nuestros jóvenes viven una auténtica penuria para poder hacer realidad sus deseos, que empiezan por conseguir y tener un empleo estable, un trabajo fijo discontinuo de doce meses, no contratos de fin de semana. Ya está bien de casar y manipular estadísticas, hagamos la prueba del algodón que, por desgracia, no es otra que dejar de ser la nación europea con más paro juvenil y las nefastas consecuencias del mismo, no siempre publicitadas ni aireadas. Antes de continuar la búsqueda quizás venga bien recordar las palabras de la señora Evangelista a su hija Natalia antes de casarse  -ambos personajes de la novela “El contrato matrimonial”, de Honorato de Balzac-  que dicen:  “- Hijita. Para que una mujer mande, debe parecer siempre como si lo hiciera su marido”.

El reto del título no es fácil, cuando  vemos que día tras día se repiten  las portadas,  con diverso enfoque, que dan la impresión que la vida y el pensamiento es uniforme, repetitivo, y que justifica aquella frase de un conocido y autodidacta músico que al verse obligado a repetir una canción, por su escaso repertorio,  decía: “ La misma, pero más fuerte”, y algo de esto , por desgracia, ocurre hoy con la prensa, medios de comunicación y mucha supuesta intelectualidad , con las perversas consecuencias que esto produce al resto de los mortales, democracia incluida. Motivos: Poder, prebendas, dinero… Hace ya tiempo que no habló de la Variante de Pajares, ni de Renfe, Feve, corrupciones, guerras, subidas, despidos, ni de los planes verdes de Arcelor, ni del seguro obligatorio para perros, ni de los viajes gratuitos a Madrid y Barcelona, y me refugio en la conocida expresión bíblica de que   “El que esté libre de culpa que tire la primera piedra”. Ahora que se cumplen cien años del nacimiento de Lola Flores, cincuenta de la muerte de Manolo Caracol y aún llegan a mí los lamentos por la muerte reciente de Pansequito,  me refugio en una noticia  que motiva estas letras y que puede ayudar a comprender una época, una política, una conducta, una ilusión, una esperanza, la de una España libre, abierta, plural. La llamada “Tercera España” del Grupo Tácito.  Y es que el pasado 30 de enero de 2023, martes, un periódico digital decía: “El Rey entrega este martes los despachos a los nuevos jueces, más del 70% sin familiares directos en profesiones jurídicas”.

Esta noticia quizás para los jóvenes no significa nada, pero para los que tenemos cierta edad y ya vemos la vida desde el balcón, es reflejo de una evolución, de unos cambios, de una apertura, de unas oportunidades, de unas mejoras. Atrás queda la España monolítica, fósil, en la que el corporativismo limaba las acciones de mejora y progreso de los más capacitados, de los mejor dotados y más esforzados… Todos  o  al menos los de mi edad, en algún momento de la vida nos hemos encontrado con personas que detentan o han detentado algunas responsabilidades para las que no estaban dotados. Su único mérito era haber nacido y ser hijo, hermano, sobrino, pariente o amigo de …

Este ha sido uno de los problemas endémicos de España y freno de nuestro progreso, como aún ahora lo es la falta de sensibilidad y medios para potenciar y mejorar la sociedad del conocimiento e investigación.  Ahora que se anuncian tantas oposiciones es responsabilidad de todos que estos avances, que estas mejoras no se detengan, que vayan a más, y más cuando algunos quieren regresar al pasado con su espuria clasificación de los suyos y los demás, cuando lo que debe primar es la valía y mérito de la persona, independientemente de su ideología o partido. Ya pululan por el ambiente algunos ejemplos preocupantes y vergonzantes. De todo ello es conocedor el pueblo llano, que por mucho que le silencien y engañen, a la menor oportunidad, al menor resquicio expresa su sentir, como recientemente los vecinos de El Berrón con su centrada y certera expresión de “Más recursos y menos discursos”, en demanda de unos mejores servicios sanitarios.

No quisiera concluir estas palabras sin expresar mi satisfacción por el reciente nombramiento como miembro de la  Academia de la Lengua Francesa del escritor Mario Vargas Llosa. Primer escritor hispano que tiene asiento en tan docta y selecta Casa. ¡Algún motivo habrán visto en sus muchos libros y escritos! Si al inicio de estas letras me basé en la autoridad de Honorato de Balzac para expresar un pensamiento o una inquietud, permitidme que acuda a él y a su misma novela para expresaros lo que le dice el viejo notario Matías a su cliente, Pablo, esposo de Natalia Evangelista: “…Una mujer debe, a mi modo de ver, compartir la suerte buena o mala, de su marido. He oído decir que los jóvenes casados que se amaban como amantes no tenían hijos. Entonces, ¿el placer es el único fin del matrimonio? ¿No es más bien la felicidad y la familia?

 



                                       José Antonio Noval Cueto.



 

 

 

 

sábado, 11 de febrero de 2023

“En un inglés fluido” (continuación)("La Nueva España Digital de Siero", 12-II-2023)


Repito título, pues el espacio de la semana pasada se quedó pequeño para expresar algunas ideas que brotan en mi cabeza y que quiero compartir con vosotros. A estas alturas de la vida,  poner en duda la importancia de saber y manejarse en inglés no tiene fundamento.  Todas las familias hacen serios esfuerzos para sus hijos tengan una buena base de inglés, no porque la lengua inglesa sea superior a la española, véase Shakespeare- Cervantes, sino por motivos políticos y económicos de todos conocidos, más cuando la lengua del imperio es el inglés (EEUU…)- quizá no tardando mucho la inteligencia artificial facilite el aprendizaje de idiomas-  como en otros tiempos  el español expandía e imponía su idioma en Europa y América, reconocida y denunciada por los escritores  de entonces. ¡Fuimos el primer Imperio donde no se ponía el sol! Hoy todos sabemos que sin inglés muchos trabajos no se consiguen. Otro tema es plantearse que nivel de inglés ha de tener uno para desarrollar su profesión, y aquí sí que entramos en muchas variables. No es lo mismo un inglés comercial, para defenderse en situaciones tópicas y típicas del acontecer diario, que usar el inglés a nivel cultural y profundo, o dicho de otro modo que nivel de conocimiento tenemos de un idioma. Pues lo que es comunicarse hay personas que, con poco más de quinientas palabras,  se comunican en su lengua materna y otras que utilizan más de tres mil – todo en relación con su nivel de escolarización- . Las diferencias comunicativas y de precisión entre ambas son palpables, evidentes.

Reconocida la importancia y ventajas que proporciona manejar bien la lengua del Imperio y su influencia, creo que es obligado hacer algunas precisiones. Nuestra lengua oficial es el castellano y tenemos “el deber de conocerla (Artículo 3 de la  Constitución), extensivo a las demás lenguas oficiales en sus territorios autóctonas  y todas ellas forman un patrimonio cultural que debe ser objeto de especial respeto y protección”. Uno puede admitir que se palpe cierta influencia inglesa, - nuestra investigación y economía depende mucho de EEUU…-pero no que nos colonicen y en esa dirección vamos, algo no muy difícil , basta recordar a Filipinas donde el castellano dejó de ser lengua oficial en 1973, ante el auge del inglés. Esta influencia afecta también a conductas  o estilos de vida, que van desde el excesivo individualismo y canto al “yo”, entronización del “éxito” o transposiciones culturales Halloween y demás campañas publicitarias y económicas como la excesiva comercialización y cosificación de la Navidad, o los valores que  trasmiten y subyace en  muchas películas del cine, dibujos animados,  (Hollywood) , la música, en la que importa más el sonido que la letra. Tomas un aperitivo o una copa por la tarde noche y siempre la música de fondo es inglesa, conocida o desconocida. Las emisoras de FM nos atiborran siempre a la misma hora con sus canciones en lanzamiento, y la mayoría, por no decir todas, en inglés. Lo de menos es la letra de nuestras canciones, lo importante es el mero sonido.

Hecha esta escueta exposición de la realidad que nos invade, aún estamos a tiempo de frenar el problema y para ello debemos volver a nuestros orígenes. ¿Existe la cultura hispana(española y hispanoamericana)?...  Usémosla, defendámosla. ¿Cómo?  Cuidando y usando nuestro idioma. ¡Somos más de seiscientos millones de hablantes! ; defendiendo nuestros valores, que han llegado a nosotros gracias a la generosidad de nuestros clásicos ,  perdamos los prejuicios y no seamos discípulos del pensamiento único que interesadamente se nos quiere imponer. Estos días ha vuelto a ser actualidad el juez Llarena, con su responsabilidad y rigor en la defensa del Estado de Derecho, a pesar de las muchas presiones y vejaciones que tuvo que soportar, y en una excelente Crónica de Julio Valdeón  tuvo el coraje de decir que le gusta la música de Café Quijano, Rosario y Niña Pastori…A mí, últimamente me deleitan las canciones de María Dolores Pradera, especialmente su interpretación de la conocida canción de “La hija de Juan Simón”, canción con letra, con mensaje.

No quisiera concluir este artículo sin recurrir a uno de nuestros maestros por excelencia, Miguel de Cervantes, que hace ya más de quinientos años, concretamente casi quinientos siete, nos dijo: “Nunca `pongo los pies por do camina la mentira, el fraude y el engaño de la santa virtud total ruina”

 

                           José Antonio Noval Cueto.





sábado, 4 de febrero de 2023

“En un inglés fluido…”("La Nueva España Digital de Siero, 5-II-2023")

 

Entre los prestigiosos asistentes a la 53ª Reunión Anual del Foro Económico Mundial de Davos ha estado nuestro presidente de Gobierno, Don Pedro Sánchez Pérez-Castejón, que en un inglés fluido, según dicen los comentaristas, habló de las excelencias de nuestra economía y de nuestras potencialidades en la comercialización del hidrógeno verde,  no sin antes avisar que las desigualdades van a más  en Europa , también en España - ventajas fiscales de País Vasco y Cataluña…-  ,  y alertar de manera interesada- estamos ya en época preelectoral-  de las funestas consecuencias que tendría para Europa, incluida España, la llegada al poder de los movimientos de derecha y extrema derecha. De los contactos para atraer inversores que tanto necesitamos y más cuando tenemos un PERTE Chip dotado de 12.250 millones de euros, poco sabemos y lo que ha trascendido es que el pasado día 17 de enero en la cena organizada por el grupo americano INTEL para representantes de los países europeos en los que tiene proyectos, como España, ninguno de los responsables de la delegación española asistió. ¿Motivos, causas?...

Creo que ha llegado el momento de coger el toro por los cuernos y partir de unas obviedades básicas: 1º Que la economía es importante para la vida y desarrollo de las personas, de los  pueblos y que no todo el empleo existente en un país debe ser solo público, pues la caída del muro de Berlín en noviembre de 1989 , la desaparición de la Unión Soviética y sus desoladoras consecuencias están en la mente de todos nosotros,  pero según una ilustrativa viñeta de Puebla da la impresión que aún no todos los políticos lo saben y más en época electoral. Creo que ya va siendo hora que se tomen medidas sobre el porcentaje de empleo público que debe haber en los diferentes servicios y departamentos de las tres administraciones (estatal, autonómica y municipal) y el costo del mismo si es que queremos un estado eficiente y no un peronismo paralizante.

Decir que toda nación necesita inversión privada para poder ofrecer los mejores servicios a sus ciudadanos es tan obvio que no creo que necesite muchas explicaciones, ya que no todo puede ser público, pues no hay dinero para ello. La máquina del Estado no puede llegar a todo; al crédito hay que ir cuando realmente sea necesario, y no de manera caprichosa y aleatorio con fines espurios (obtención del voto). Es misión de las autoridades crear las condiciones administrativas adecuadas para que la máquina productiva dé los frutos deseados: empleo, dinero, y para lograrlo es imprescindible conocer la realidad que nos rodea y buscar la evolución y mejora de la misma. De todo esto cuanto digo tenemos en Siero ejemplos en su doble sentido: Piénsese en las ventajas económicas, laborales y sociales que supone la apertura de Amazon y las enormes pérdidas de recaudación que ocasionan la multitud de bajos o comercios cerrados. Se necesitan emprendedores, empresarios que generen un tejido social que ilusione y motive una zona, una localidad, una región…

Y esto que es tan obvio, tan evidente, parece que hay políticos que no lo saben o no lo quieren saber. Si esto es grave en un amateur, mucho más en aquellos que tienen responsabilidad ante la sociedad y la defraudan y engañan sin el menor reparo, cuando saben que el principal problema que nos acecha a todos es la falta de trabajo, casi tres millones de personas en paro, y en el mes de enero más de 70.700 personas parados más. Que se vaya a Davos, Marruecos, Nueva York , Pekín o Singapur , como en su día el diligente ministro  Gregorio López Bravo entabló contactos con China y Moscú, merece nuestro aplauso y consideración, pero que miembros del mismo equipo de Gobierno se dediquen a señalar y desprestigiar a empresarios de una reconocida experiencia y prestigio avalado por los hechos, es algo que cuesta entender, a no ser que su inmadurez les haga desear vivir en otro tiempo y no al servicio de los españoles, sino de sus trasnochados ideales.

El dinero no se reproduce por sí solo. Todo viene fruto de un trabajo, de un rigor, de un riesgo, y es que como decía un buen amigo: “·Las patatas si no se siembran, no se comen”.

Ahora que estamos en precampaña electoral viene bien recordar que la política es algo muy serio, que exige responsabilidad, que nos debemos a una sociedad, a unas personas que depositan en nosotros su confianza: “No les defraudemos, seamos previsibles”. Hace ya muchos años, allá por los años treinta , un diputado socialista de Luarca, don Álvaro de Albornoz, en un martes en la Pola decía a los presentes estas palabras que hago mías : “No importa subir al poder hombres de mayor o menor inteligencia – añadiría yo que sepan más o menos inglés- sino hombres que tengan conciencia…” ¿Se cuida? ¿Importa mucho en este mundo más cosificado que humanizado?.

Por tercera vez consecutiva terminó este escrito recordando que el verdadero progreso de los pueblos y personas es el progreso moral, y el nuestro es francamente mejorable

 

 

                             José Antonio Noval Cueto.