Ahora que proliferan sucesos, hechos y personas que incitan a
la desesperación y al desencanto, permitidme que busque un poco de aire fresco
y me refugie en la inocencia infantil que proporcionan nietos y demás colegas
que con su conducta e inocencia nos hacen ver la necesidad de un “corazón
puro”, para subsistir como corderos astutos en medio de lobos, de reptiles…ya
que en esta sociedad volátil,hedonista y cosificada el ser humano está en franca
amenaza.
Poco antes de escribir estas letras, al pasar junto a un
árbol del parque de la Pola, de tamaño mediano, retorcido, de tronco pequeño,
delgado y de copiosa copa, accesible, que como si fuera un caracol cobija en su
interior misterios y fantasías infantiles, mi nieto me confesó:
-
Mira
,Tito ,este es mi árbol preferido. Es un laurel cerezo.
-
Yo
desconocía su denominación y con el ánimo de continuar la conversación le pregunté:
-
-¿
Sabes cómo se llama este Parque?.
-
Con
ver su mirada expectante supe la
respuesta, y le respondí que Parque
Alfonso X el Sabio, rey que protegió y
difundió el castellano y su cultura, impulsor
de la Escuela de Traductores de Toledo y que tuvo el acierto de fundar ciudades
como Villaviciosa, Avilés, Tolosa y Villafranca
de Ordicia , ambas en San Sebastián , y a Pola de Siero en 1280. Orden que el
señor de la zona, Don Rodrigo Álvarez de Asturias no ejecutó hasta 1310.
Podría decir más cosas, pero ahora
que sólo existen lo inmediato, lo automático
– las Humanidades a hibernar- me conformo con que mi nieto se quede con el
nombre de Alfonso X el Sabio y su vinculación con Siero. Este es mi pequeño
homenaje al monarca ahora que se van a cumplir 802 años de su nacimiento, un 23
de noviembre de 12021, y que la pandemia ha impedido celebrar como se merece,
sólo recientemente la Comunidad de Murcia lo ha recordado y festejado. Por
parte del Alcalde, don Ángel García González, tenemos el compromiso de abordar
en el 2023 la ampliación del parque hasta los aledaños de la antigua Casa de Cultura.
Decisión acertada y deseada por todos, pues ya se queda pequeño. Del parque se podrían decir muchas cosas, ya
del palacio del Marqués de Santa Cruz de Marcenado, ya del quiosco de la
música, ya de la fuente del Pavo Real, uno de los lugares más fotografiados y
espero que también del laurel cerezo y de otras especies arbóreas que lo
pueblan, y también, cómo no, de paseos y amores, de charlas y bailes… Hay mucha
huella humana en cada una de sus calles,
bancos, árboles y baldosas y en las placas o efigies que lo habitan.
El pasado día 11 de febrero, Don
Ramón Roces González, jardinero municipal y una de las personas que mejor
conocía cada centímetro del parque y su problemática, a sus 92 años, con su
mirada sana y risa franca, ha emprendido rumbo al cielo en su Renault 8, color blanco
crema. ¡Buen viaje!¡Que Dios te tenga en la gloria! ¡Muchas gracias por tu buen
hacer!
José Antonio
Noval Cueto.
P.D Hace unos días un niño, en la parada del autobús, preguntaba : ¿Por qué a Plutón le sacaron del sistema solar? Espera respuesta.
Un saludo.
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