domingo, 26 de noviembre de 2023
“En busca de la verdad…” ("La Nueva España Digital de Siero, 26-XI-2023")
viernes, 17 de noviembre de 2023
“El hombre pide …JUSTICIA” ("La Nueva España Digital de Siero, 20-XI-2023")
lunes, 13 de noviembre de 2023
“Agua y palabra, necesidades del momento…” ("La Nueva España Digital de Siero, 12-XI-2023)
Ahora que llueve menos , que se secan pantanos y desparecen
acuíferos, no tiene que sorprender que el precio del agua aumente, dada la
escasez de la misma. De persistir esta situación, el agua puede convertirse en
el petróleo del futuro, con las limitaciones que esto genera en toda España y más
en esta España turística nuestra que ya aconseja un uso racional de la misma en los hoteles de lujo, y también en nuestra
tierra, tildada en su día, por la abundancia de agua, de la tierra del paraguas. Si esto ya alarma en
Asturias- véase el problema de Lieres-, que no pasará en las tierras del sur,
donde la desertización avanza cada año, lenta y persistentemente, disminuyendo
población, cerrando pueblos, dificultando la vida. No hace mucho uno de los
ideólogos más reputado del momento, el señor Monedero, dijo que el principal
problema de España era la desertización. Problema que agrava más la existencia
de la llamada “España despoblada” y que limita la existencia del medio rural
que asiste impasible al éxodo de población- sólo se quedan los mayores- y el
peligro que ello entraña para la pervivencia de la especie, pues por faltar ya
falta leche para elaborar quesos. Quizás tengamos que acudir al diseño en 3D
para conseguir harina, jamón, chorizos, salmón, bacalao, y que no tardando
mucho las farmacias se conviertan en restaurantes. ¡Adiós a la cocina de los
sabores!
Esto que es palpable en muchas tierras de España, también es
evidente en todos los concejos de
Asturias e incluso en el mismo Siero, donde la maleza y los “escayos” son los
dueños de las praderas, llegando a los límites de viviendas y caminos, e
invadiendo o constriñendo caminos públicos – sendas peatonales desaparecidas- , el alumbrado público, palos
del teléfono, con el consiguiente perjuicio y peligro, y trasladando la
impresión de pueblos más pequeños ,en ruina, desamparados, con cierto exotismo
en verano, a punto de ser absorbidos por la madre naturaleza. Aumenta lo que
podríamos llamar bosque, selva, disminuyen los ‘praos, huertas’ ¿En qué se han
quedado muchas tierras de maíz y fabes
de mi infancia?…La zona rural exige un estudio riguroso, un replanteamiento serio, si es que de verdad la
queremos preservar y potenciar…
Expuesta esta preocupación que me invade siempre que deambulo
por mi pueblo, vais a permitirme que me centre en un tema al que no damos
importancia o al menos no la debida, y es el de nuestro idioma nacional, el
idioma que nos identifica como nación, el castellano o español. Ahora que hay
tan reivindicación política más que idiomática en defensa de las diferentes lenguas de España,
no viene mal recordar que nuestro idioma nos permite comunicarnos con
seiscientos millones de personas, que habitan en diferentes lugares de orbe
terráqueo, que incluso, en el mismo Nueva York, tenemos emisoras de radio,
televisión y prensa en castellano, que son muchos los neoyorquinos que hablan
nuestro idioma, y que gracias a él nuestras exportaciones se han incrementado
considerablemente en los últimos tiempos.¿ Alguien se imagina a un vasco o a un
catalán hablando en su lengua para conseguir carga de trabajo para sus empresas
en Méjico, Argentina o Perú? Y además es
el segundo idioma que más alumnos tiene y de ello bien se encargan los
diferentes Institutos Cervantes existentes por el mundo. No deber haber ningún
enfrentamiento entre las lenguas. Cada cual es muy libre de usar el idioma que
quiere o prefiere, y por muchas leyes que constriñan o apoyen el uso de un
idioma, siempre será el ciudadano libre, quien usará el que quiera, pero no viene mal recordar, ahora
que estamos en tiempos de tanta reivindicación, que la mayoría de las lenguas
de España, excepto el vasco, son de origen latino , que se abastecen de un
mismo manantial, de un mismo acuífero, el latín, la lengua del Imperio
romano, y a la que acudimos siempre que
surgen dificultades ya en busca de sufijos, prefijos para crear palabras nuevas
como hacen los científicos y técnicos , ya en busca de una etimología, de un concreción semántica, de una
precisión… y que últimamente, injustamente, torpemente, hemos relegado al
olvido en nuestros planes de estudio, con el daño que eso ocasiona al resto de
sus lenguas filiales (gallego, catalán, castellano, italiano, francés, rumano…)
y es que a través de un idioma se trasmite una visión de la vida, de la
realidad, -la lengua es sangre del espíritu decía Unamuno- y basta para ello darse un paseo por la Roma
actual. Hoy, como decía un profesor mío, hablamos hoy el latín del siglo XXI:
El castellano.
Ahora que tanto
necesitamos la ayuda de emigrantes que cubran nuestras demandas de empleo, se
comprueba que el idioma facilita la resolución del problema y que el mayor
número de emigrantes son hispanoamericanos.
José
Antonio Noval Cueto.
P.D . No quiero terminar sin hacerme eco de dos noticias: 1.
Dimite el primer ministro portugués don Antonio Costa que en rueda de prensa
aclaró a los periodistas el motivo de su dimisión: ”Yo no estoy por encima de
la ley. Si hay alguna sospecha que sea investigada…Mi obligación es también
preservar la dignidad de las instituciones democráticas”. Fuera de los aciertos
o errores que la Justicia investigará, estas palabras revelan un alto sentido
del deber digno de encomio. ¿Hubiera
sido posible aquí?...
2. La revista
Actualidad Económica del Mundo confirma que Asturias es la región donde más se
teletrabajo del norte de España y la tercera de España. ¡Enhorabuena!
sábado, 4 de noviembre de 2023
“Españolito que vienes al mundo…”("La Nueva España Digital de Siero, 5-XI-2023")
Una de las dos Españas ha de helarte el corazón (A.Machado).
Nunca más oportunas estas palabras del poeta cuando vemos los vendavales y huracanes de sonidos e
imágenes que nos azotan estos días, para intentar justificar lo que no tiene
justificación: a/ Que haya una España de
primera (País Vasco, Cataluña) y otra de segunda, el resto de las autonomías y
regiones, b/ Que la justicia no sea igual para todos c/ Que todo este movimiento lo abandere un
partido que dice defender la igualdad de todos y para todos, y solo para hacerse con el poder, sin escuchar la máxima juiciosa y prudente de sus mayores que
le recuerdan que no todo vale en política y que le ruegan que tenga la
generosidad de no tensionar y complicar la vida de los demás, de los que nos
consideramos españoles, porque así lo avala la Historia, y si algo queremos es
futuro, trabajo, justicia, paz…En nombre de España respete la ley que nos hemos
dado.
Esta explosión de imágenes y palabras ha tenido su puesta de
largo esta semana, a raíz del juramento de la Constitución de la Princesa de
Asturias, doña Leonor, el pasado martes, 31 de octubre, donde hemos visto una Princesa sencilla, ilusionada
y responsable prometer fidelidad y lealtad a la patria y cumplir y defender la
ley y a un Presidente de Gobierno, en funciones, Don Pedro Sánchez
Pérez-Castejón, prometer lealtad a la Princesa, sin el apoyo de sus socios de
Gobierno. Casi al mismo tiempo o poco después, responsables del PSOE
desconocido, se entrevistan con Puigdemont en Bruselas en busca de su apoyo. A
partir de ahí, hacen su entrada en escena los comerciantes del mercado persa del
qué me das, qué deseo…y la letra pequeña que no se suele leer y es la que más
obliga. Para empezar a hablar, como gesto de buena intención, concédame la
amnistía y perdóneme los 15.000 millones de euros de este año…La negociación
sigue abierta.
No tenía pensado hablar de estas cosas y agradecer más la
eficacia y trato exquisito dispensado del operario de RENFE cuando solicité información y billete para
Madrid – agradezco mucho el buen servicio
presencial; el on line , no me gusta, no
lo uso- , centrarme en los pequeños y motivadores detalles del día a día, pero
acontecimientos recientes me han obligado a ello.
El pasado martes , por
las calles de Pola, un coche con
megáfono y buena explicación, denunciaba el genocidio de adultos y niños en
Gaza, con el aplauso de todos los que no entendemos que la única argumentación
política sea la violencia, la muerte, y ello me hizo preguntarme por la
sociedad civil y su necesario protagonismo. En España, sin llegar a esos
extremos, estamos entrando en una senda muy peligrosa si una misma Ley no regula
la vida de todos nosotros. Estos mismos
días, desconozco los motivos, quizás el subconsciente o cualquier otro, me ha
llevado a leer la novela de Boris Pasternak titulada “El doctor Zhivago”, que
había visto en el cine, hace ya décadas, y que llevaba años en los anaqueles de
mi librería, y en la que me he encontrado parlamentos que hacen a uno pensar, y
más en los actuales momentos que vivimos, cuando el protagonista nos dice:
“Desprecio la política. No me gustan los hombres indiferentes a la verdad…No
conozco corriente más replegada en sí misma y más apartada de los hechos que el
marxismo…”… Y algo de esto o mucho, palpo en la realidad actual española. Desde
la caída del muro de Berlín , allá por noviembre de 1989, concretamente el día
9, el marxismo ha cambiado de estrategia, ahora se preocupa menos por los
desfavorecidos y más por la mujer y por la identidad de género o cualquier otra
estrategia que les lleve al poder. Por último, ayer, a media tarde, en las
calles peatonales de Pola me encontré a un buen, moderado y juicioso amigo, que
después de los lógicos saludos, me expresó su preocupación por la situación
caótica y anárquica que vivimos. ¿A dónde vamos? Esto no puede seguir así. No
lleva a ningún sitio. Si quedamos sin ley, qué será de nosotros…Se abre la
selva…Se extiende el reino del “escallu”. Reflexiones que hago mías y que como
argumento de autoridad os traslado. Quo vadis España? Hace unos días el
expresidente González, a raíz de su estancia en Avilés dejó, como suele ser
costumbre, unas certeras palabras que dicen mucho: ”Un indulto es perdonar, una
amnistía es pedir perdón…”
En una reciente entrevista la actriz Carmen Maura decía que en España
los partidos “no logran ponerse de acuerdo ni para comprar el pan”. ¿Quién ha
roto el consenso del 78?... Hace ya muchos años, antes de aprobarse el fallido
Estatuto de Autonomía de Cataluña, en 2006, un senador socialista me dijo que
no estaba de acuerdo con la deriva de su Presidente . ¿Qué diría hoy?
José Antonio
Noval Cueto.
P.D “Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda
prevalecer discriminación alguna por ‘razón’ de nacimiento, raza, sexo,
religión, opinión…”(Artículo 14 Constitución Española de 1978)